viernes, 22 de mayo de 2015

Tú y yo, nosotros?

YO

¿Quién soy yo?, es una pregunta que se hace todo el mundo alguna vez en su vida, yo me la hago varias veces al día, quien soy yo ahora mismo, qué es lo que quiero, qué es lo que necesito, qué es lo que siento, son preguntas que me forman, soy todo y nada, soy caos y equilibrio, soy la imperfección en una esfera perfecta, pero qué soy realmente, que me forma, que me deforma... físicamente bien formado, menos los problemas de desviación por la columna, hablando físicamente estoy bien formado, como me veo físicamente es otra cosa, me veo flojo, me veo cansado de luchar, veo persiguiendo metas imposibles, siguiendo una utopía andando por andar, andando por caminar, pero me veo físicamente agotado, cada día es una guerra para mí, y vivir un día más ya es de por si una victoria.

¿Biologicamente?, podría decirse que bastante sano, con deficiencias respiratorias por asma a consecuencia de una alergia de nacimiento a los ácaros del polvo y el olivo pero nada exagerado, vacunado y tratado durante 7 años, la alergia en sí no es un problema, sin embargo la talasemia minor si, para mí no es un problema personal, tengo menos resistencia física que cualquiera con mi edad o mi capacidad, igualmente bastante sano y más resistente que mucha gente, aunque... hay momentos que desearía tener más... (o más bien algunos lunes), y la mayor pega de mí, mi estómago débil y maltratado, si no lo atacan mis nervios y dudas, lo hacen las pastillas, los médicos y los excesos, es mi talón de Aquiles, ni fumo, ni me drogo, ni nunca lo he hecho, y beber... siempre poco y cuando lo he necesitado menos de lo justo, solo una vez me he pasado de verdad y no sirvió de nada, otras el mezclar me ha producido la sensación de borrachera por el desequilibrio, o la ralentización y la dificultad de pensar, pero nada más...

¿Mentalmente?, me considero una persona inteligente y abierta a todo, mi mente solo tiene una barrera, yo, yo soy mi propio límite y mi lucha es siempre superarlo, una vez más, la guerra el conflicto está aquí, soy una persona guerrera, en todos mis ámbitos sin sacrificio no hay victoria, cualquier victoria sin bajas o sin esfuerzo no sabe igual, mi mente necesita de otras mentes, de otros retos y dificultados, no sé vivir sin música, sin cambiar de estilos, no puedo elegir solo uno, no puedo elegir solo una canción, no soy solo yo en ese momento, soy una persona que siempre evoluciona, hoy esta aquí, mañana no, necesito ir creciendo en todos los sentidos y el mental para mí es el más importante, la inteligencia no es sabiduría, y esta la he desarrollado a base de escuchar, de estrellarme, y ser consciente de mi alrededor, conocerme y saber quien soy fue uno de mis mayores dificultades, y aun en día hay veces que descubro cosas nuevas, o he cambiado y no me he dado cuenta, soy complejo hasta el nivel molecular, y otras veces más simple que un átomo de hidrógeno, soy altamente inestable, el problema de ser tanto es alimentar tanto, en todos los sentidos necesito grandes cantidades de agua, glucosa, y de problemas que solucionar, estímulos y metas, objetivos, todo eso y mucho más lo necesito al día, y es agotador, satisfacerme intelectualmente no es algo que cualquiera pueda hacer, y con simplemente aportarme algo que no sea de cosecha propia es siempre agradecido, mi visión de perfeccionismo y ser perfeccionista es mi meta y mi muro, y eso solo el que la lleva la entiende.

¿Emocionalmente?, soy una persona cálida por defecto, puedo ser egoísta a veces, sobretodo a las emociones que afecten a la seguridad, necesito esa seguridad, esa estabilidad, por las circunstancias de mi vida siempre me he visto rodeado, rodeado de "amigos", y familia, y sin embargo siempre me he visto solo, hasta hace relativamente pocos años, tuve un corazón tan grande que no me cabía en el pecho, y pesaba tanto, y daba tanto a los demás que siempre querían más, y lo dí, empezaron a pedirme cachos que nunca devolvieron, fui la consolación de muchas almas, y fue el pez del pescador que pasaba hambre, alimente una boca que pasaba hambre y antes de darme cuenta, fui la puta de un pueblo pescador, no les valía solo paliar el hambre, querían afecto, cariño, seguridad, todo fachada para seguir su mierda de vida en una ciudad costera con mentalidad de pueblo, donde todo el mundo barre para su casa, donde todo el mundo te quiere en su casa, y cuando sales solo se habla mal de ti, me clavaron tantos puñales en la espalda, tantos que no cabían más, y se cabrearon porque no cabían más, bendita sea mi ignorancia porque mi paciencia se acabó, y el espacio que ocupaban también, como no podían por la espalda lo intentaron de frente, y hubo hasta quien pidió permiso, y le dejé, si lo iban a hacer igualmente, porque no... llegó el día en que no me quedaba sangre en el cuerpo, desfallecí, morí, no había nada en esta vida ya que me hiciese levantar, ni ilusiones, ni sueños, ni esperanzas, perdí lo único que me quedaba esa esperanza, y no me levanté, recordé como pez que empecé siendo, mi sitio no era la tierra si no el agua, y me arrastré y me hundí, lentamente fui viendo la luz apagarse, sentir el agua en mis pulmones y notar como no respiraba, tenía todo tan perforado que el agua entraba y salía por todos lados, era un pez roto, un alma rota, y un muerto en vida, llegué al fondo marino, no se veía nada, todo estaba frío, pero estaba tan cómodo allí tumbado, no escuchaba nada, no había nadie, ni nada. El tiempo pasó y no era consciente seguía allí tumbado a gusto, pero empezaron a llegar voces, empezaron a tirar de mí, a susurrarme cuentos y leyendas, era todo tan bonito, que porque no soñar, y me dejé llevar, ya muerto no tenia nada que perder, y me convertí en el héroe de mi propia leyenda, me convertí en el guerrero que mataba a un dragón y salvaba a un reino, me convertí en rey, y el tiempo pasaba, y vino la pobreza, el hambre la crisis, y el rey pasó a ser el culpable era el rey dragón, que reinaba y decía proteger pero no combatía el hambre, la pobreza y no evitaba el desastre, lo señalaron juzgaron y desterraron, el rey de una colina al sol, maldecido por todos, y vio como pasaba la vida, y como pasó de héroe a villano, si es lo que querían, si es lo que necesitaban, eso sería, pero no sería una amenaza ficticia, sería real, me convertí en dragón, mi armadura se convirtieron en escamas, mi espada de doble filo en una lengua bífida, mi escudo tapó el agujero de mi pecho, y mi corona fueron los cuernos que con orgullo mostraba, custodiaba una colina donde solo reinaba yo, me aleje del mundo real y fui la pesadilla de todos los sueños de los demás, y muchos me adoraron por ello, hasta que una persona, una bella dama más dolida que yo vino a que acabase con su sufrimiento, yo tan poderoso, tan frío, tan duro y cruel, yo tenia que ser quien acabase con su sufrimiento, cuidado con lo que deseas dije, no vaya a ser que cumpla lo que realmente crees necesitar, y no ser capaz de aceptar lo que eres y necesitas en verdad, y así fue, acabé con su sufrimiento, le di protección, cobijo bajo mis alas, se enrosco bajo mi cuerpo, y se sintió segura, pero no quería eso, quería calor, el que nadie le había dado nunca, y yo ya estaba muerto, un dragón sin fuego, no es un dragón es un lagarto, esas palabras me atravesaron más que cualquier arma, se alejó y dejé que se fuera, volé de esa colina, volé lejos, lejos de todo y encontré un bosque, oscuro, con la mayor inmundicia, mayores ladrones, traficantes y la peor calaña, arranqué mis alas, enrosqué mi cola, y con el tiempo me había transformado en un ser reptil, legua bífida, caminaba a dos patas, finas escamas negras, mis ojos amarillos y mi pose medio erguida, no fue difícil unirme a aquel antro, me encontré con mucha clase de criaturas, vampiros, orcos, trolls y trasgos, falsantes, ladrones, pero no se qué vieron en mi, cada dos por tres me veía rodeado, siempre me acaban pidiendo consejo, o que los liderara, ¿liderar a qué? ¿a donde?, hasta que un día una bestia me agarró y me mordió, no entendía que pasaba, no entendía que quería, y me dijo que me quería a mí, llevaba toda la vida buscándome y me había tenido que encontrar en el peor sitio de la tierra, ?¿por qué me escondía de ella? confundido le negaba todo con la cabeza, no era yo a quien buscaba seguro, yo era un monstruo, yo era "Dark winter night of summer" y ella me dijo que daba igual, que le daba igual, que ella quería ser mi monstruo, y le dije que yo no tenía sangre ya, no podía amar, ni lo haría jamás, su acción fue cortarse derramar su sangre contra mi boca, mi cuerpo ardía, mis escamas se volvieron mármol, un mármol blanco, duro, liso y frío, pero en mi interior volvía a correr la sangre, al menos un poco y mi cuerpo empezó a latir, sentí como iba ascendiendo de esa oscuridad, como emergía del agua, y ella tiraba de mí, empecé a ver como me despertaba del sueño, y mis alas negras se extendían, volaba en mitad de una tormenta, en un mar nunca visto, de noche y lloviendo, notaba el frío en mi piel, era algo parecido a un vampiro, pero vi la colina donde fui un dragón, vi el pueblo del que fui rey, y vi el bosque oscuro al lado de ellos, no sabia que era real o que había sido un sueño, pero empecé a construir en esa colina una casa, un refugio, pero no quería que fuese de madera, no, quería uno de piedra donde nadie pudiese volver a hacerme daño, donde nadie nos molestase, piedra a piedra pasé los días, mi sueño era vivir en él, y vivir con la persona que me hiciese sentir vivo, cuando lo terminé de construir, ella empezó a traer gente a casa, a meterlo detrás de los muros, no me parecía bien, pero igualmente se lo debía, y se lo permití, empezaron a beber y a emborracharse, no me gustó pero se lo debía, se lo permití, y un día uno mostró los dientes, y no se lo permití, al igual que ella no había permitido que nadie de mi pasado entrara en esos muros, mira en lo que te han convertido me decía, eras un monstruo y ahora eres especial, me llegué a creer muchas cosas, alejé de mi a todos, a todos menos a ella, pero ella cada vez se rodeaba de más gente, y me costaba más verla, las mentiras empezaron a hacerse presentes, y me retiré a una torre, a una donde pudiera ver lo que pasaba fuera del muro, me veían y yo los veía, los celos suyos se hicieron míos, las discusiones presentes en las cenas, y la distancia era una pared invisible que crecía por minutos, un día me mordió y no sentí nada, le mordí y sentí otra sangre, otro sabor y me empecé a deformar, me empezó a salir pelo negro, a obsesionarme por la luna, y a retirarme a dormir lejos, me vio diferente sabía que me había traicionado y no podía verme así, huyó y para que me olvidase de ella, colgó un póster enorme con él, uno tan grande como para la bestia que había creado, me sacaron una mañana entre todos, me subieron a aquel póster, y me colgaron el titulo de "puta y apalea", me dejaron como el mártir de una vida, como el monstruo causante de la separación y mi sangre se volvió negra, me arranqué los clavos que me ataban a ese póster y me arrastré a donde nadie podía verme, odiaba lo que era, lo que me habían convertido, lo odiaba todo, y a todos, me arranqué lo que me quedaba de humanidad, me arranqué la carne de los huesos, las alas, los cuernos, me quedé con el más puro odio y lo abracé tan fuerte, que pude ver el abismo y él me devolvió la mirada, y me dijo, déjame a mí, no te arrepentirás, ya estas muerto ¿recuerdas? deja que la oscuridad te invada, deja que yo me haga cargo de todo, descansa, y eso hice, hoy vivimos la oscuridad y yo juntos, pero yo tengo el control, cosa que pude hacer al salir una noche, y cruzarme con un fuego rojo, un fuego que no quemaba, me pudo la curiosidad y ese gato ya estaba muerto, así qué por qué no, el odio no pudo conmigo así que decidí ir, y ella me curó, me expulsó ese odio, esa oscuridad la rechacé y se fue hundiendo hasta mi alma, su sacrificio la dejó débil y tuvo miedo de mi, de mi oscuridad y huyó, mi corazón antes lleno de odio ya no lo tenía, no tenía nada, estaba.... vacío, frío seguí adelante, y sin amor me puse metas, sin sueños objetivos, sin ilusión busqué en la oscuridad, y sin ilusión confié en el tiempo, una noche, del 21 de Abril del 2015, la vi, la esperanza, esa llama que soplaba el viento, ese viento que me levantaba sin alas, sin promesas, me dediqué a mirar, y la curiosidad me pudo de nuevo, no podía matarme, vuelta a empezar, me acerqué, y me hizo daño, quemaba, era real, pero era real, daba calor, mucho, noté el fuego de nuevo, pero no era yo el que ardía, me volví a acercar y me volvía a quemar, me vi envuelto en llamas, y la oscuridad me gritaba déjame salir, yo me haré cargo de ella, aléjate y yo haré el resto, pero no... a veces me miro al espejo y veo mi rostro aun quemado, mi piel negra, aun mi mano derecha transformada en garra, los huesos medio expuestos, y el corazón vació, pero latiendo, late por ella, por esa llama que me quema, que me desespera, que me calienta y me da calor, que me da esperanza en la oscuridad, y amenaza con apagarse con cada viento que le sopla... tan frágil como la porcelana es mi mayor tesoro ahora mismo, y mientras merezca la pena lucharé con el con todo... pero si se apaga, si se va... no tendré aun fuerzas para perseguirlo y tristemente en el tiempo que disponemos no lo haré, o crecemos juntos, o crecerás sin mí, te quiero de verdad y por eso creo que merece la pena luchar y estar a la altura, pero es un trabajo de dos, este soy yo.

viernes, 1 de mayo de 2015

Capítulo 1 - El origen del libro


Parte 1 - To the hell and back


Sonaban tambores de guerra esa noche, gritaban iremos al infierno y volveremos, confiado aun desconocía hacía donde nos dirigíamos realmente, nos unimos a la una batalla ya empezada, cargamos hacia el centro de la ciudad, nos unimos a un pequeño grupo que nos aguardaba, me prometieron reinas y riquezas, bebida y una batalla que memorizar. Sin mirar atrás me acerqué a aquel campamento, me presentaron a algunos nuevos reclutas, sí, esta vez yo era el veterano que volvía a este desolado territorio, igualmente me impresionó la espesa melena que colgaba de una guerrera, dorada y lisa ondeaba suavemente mientras se levantaba a mostrar sus respetos al llegar, sin poder apartar la vista, devolví el saludo y hice lo mismo con los demás, al volver a alejarme le pregunté a mi compañero si era el tesoro que habíamos venido a conquistar, y me dijo que no, que me olvidase que ese era imposible, desilusionado seguí adelante, fuimos al centro del infierno, pasaron las horas, la desmotivación de los hombres fue mayor, ahí solo había el espíritu de jóvenes que querían perderse en una noche de lujuria, beber hasta perder el conocimiento y no recordar lo que había pasado al día siguiente... Pensé en una retirada a tiempo puede ser una victoria, y allí estaba, la imposible, me dediqué a observar de lejos mientras conversaba con un joven a que representaba la justicia, aburridos y desilusionados todos nos embarcamos en una conversación absurda, donde al final el centro de atención acabamos siendo yo y la guerrera con la melena de un león, frases y dichos, poníamos entre dicho todo lo que decía el otro, jugando con las palabras siempre me dejaba con ganas de más, mi curiosidad empezó a aumentar, y mi interior empezó a encenderse el fuego, por fin había llegado a la batalla, por fin algo de acción pensé, por fin algo de emoción, no daba tregua, escondía sus armas y detrás de su afilada sonrisa mil dagas ocultaba, cogí mi escudo y me retiré el yelmo, empezamos a indagar insatisfecho acabaron interrumpiéndonos una y otra vez por cosas sin importancia, nada en ese momento lo tenía, nada menos una ella, terminó la noche acompañando a una cría, desorientada por el alcohol y el desamor intento ahogar las penas en un vaso, y acabó por ahogarse ella en su propias lágrimas, la dejé con su compañera también algo tocada y me fui a dormir. Aquella noche había merecido la pena después de tantos años sin afilar la mente.

Parte 2 - Losing my religion


Volví a levantarme como otro día cualquiera, pero no podía evitar recordarla, la conversación cada palabra que no decía esos silencios, esos espacios... me desquiciaba.. no podía dejarla pasar, directamente fui y la busqué no la encontraba por su nombre, no había ninguna Lourdes con esa melena de león, no me dí por vencido... seguí y seguí buscando... y la encontré, y sin mucha esperanza de ser respondido le escribí y la añadí, antes de darme cuenta estábamos hablando de tonterías, después de horas de conversaciones sin mucho sentido y de cosas del pasado, acabamos dando un paso más, teníamos el móvil de cada uno, y sin saber muy bien como ya estábamos sentados tomando café a unos cien metros de mi casa... interesante cuanto menos, nuestras conversaciones y charlas vacías me llenaban completamente, me volvía loco y el tiempo se pasaba volando, al final cualquiera de los dos encontraba cualquier escusa para quedarnos más tiempo charlando, cada minuto, cada segundo, otro autobús vendrá, el siguiente me voy, y se fue. El silencio fue la piedra que golpeó el fondo del vaso que antes estaba lleno, todo estaba vacío, no había nada que pudiera ocupar esa sensación, ese aire llenaba todo el vaso de agua, que estaba pasando... no lo sabía no podía entenderlo, me estaba desquiciando solo quería quedar y quedar, hablar y hablar, y me desquiciaba, pensaba en ella y sonaba "Losing my religion" como si todo estuviese conectado, como una burla de vida. Pasaron los días, las conversaciones, cenamos juntos, salíamos a pasear el perro, tenía ya a alguien en su vida y no importaba, no era mi objetivo conquistarla, solo saborear cada conversación que planteábamos, saborear esa mirada llena de vida y de fuego que me tragaba y me absorbía completamente, me encendía poco a poco y me enganchaba como una droga.

Pasaron unos días más, y salimos a cantar, salimos a beber, y acabamos escuchando Queen, compenetrados toda la noche eramos uno, nos reíamos, bailábamos, nos mirábamos y nos sobraban las palabras, esa noche fue mágica, fue única, y fue legendaria como ella, una entre miles, y me moría por besarla, por tocarla y abrazarla tan fuerte que no pudiera huir, pero no debía, no podía... no quería perder esa oportunidad, esa persona tan especial. esas conversaciones, esas miradas y esa esencia que siempre me dejaba con ganas de más. pero cometió un error, soltar una lanza de doble filo también corta a quien la empuña, el vaso se empezó a llenar, de repente la boca sabía a ceniza, el corazón me oprimía y todo era una jaula sin barrotes cuando rompió a llover, esa sensación de observarlo todo, de que el mundo se encogía, de desconfianza desconsuelo, de falta de luz... la confianza era un sueño que pocas veces cumplía expectativas, y sentía atracción por la oscuridad que yo llevaba dentro, pero no era yo esta vez, era ella... notaba el frío en el cuerpo, el fuego en los pulmones y la ira en el corazón, esa maldita ira de nuevo que como petroleo recorría cada latido y mancillaba el resto del cuerpo, todo era caos y a veces felicidad, pero la verdad es que tenia unas ganas de huir, de dejarlo todo atrás, de romper esos barrotes invisibles, de romper a llorar y apoyarme en alguien en quien confiar de verdad, pero esa persona no existe, ese mundo no existe, y estos barrotes aun sin existir no me dejaban salir, y fuego de mis pulmones se acentuó, exhalé el humo y la boca se lleno de ceniza, el amor era un ideal que solo cumplía las expectativas de un sueño, un sueño que nadie podía cumplir, y allí en una esquina una luz, pequeña, azul, oscura.. pero una luz, y cualquier luz en esta oscuridad es un sol en mitad de la galaxia, era imposible no verla, pero estaba cansada de vagar en esta jaula, estaba cansada de jugar con los sueños y las esperanzas que no me llevaban a ninguna parte, y decidí seguir así, mirando esa luz, pero sin tocarla.

Comenzó un nuevo día, ofrecí romper esos barrotes, romper la oscuridad, disolver la ira, enseñar lo que es el amor, crecer y ayudarla a crecer, mostrar todo lo que he aprendido y empaparme con su experiencia, ofrecí todo sin ninguna garantía, cuando nunca antes lo había hecho a NADIE, pero a ella sí, porque lo merecía, merecía esa oportunidad que nadie le había dado... y se la dí, porque yo era luz azul, yo era esa llama en la oscuridad.y yo era el miedo que tenía que saliese mal, que defraudase el ideal de amor, que no fuese justo, que fuese otro libro de traición, y decidí ser ese libro, y demostrar que no traicionaría su confianza, su libertad, su ideal...

No me dio una respuesta clara, y por un momento olvidé que ya estaba acompañada, aunque de forma temporal, aunque tuviese fecha, pero tenía algo, y no tenia sentido seguir, aunque para mí ya era demasiado tarde. me había interesado demasiado, me había dejado llevar por mi orgullo y el ya la pregunta estaba en el aire, y hasta que no estuviese rechazada no había vuelta atrás, yo nunca doy marcha atrás...

Ciegamente empezamos a caer en una espiral de confianza donde cada uno pedía más del otro, entre una cosa y otra nos dejamos de ver, se nos hacía raro no poder vernos como tan a menudo hacíamos, seguíamos hablando pero ya no a solas, nunca se daba el momento, y como no teníamos tiempo nunca para contarnos nada serio, planteamos empezar un diario compartido, un libro donde escribir sin ser vistos, donde ser nosotros mismos, decir lo que pensamos o sentimos sin que nadie interfiera, sin barreras, sin barrotes, sin limites...

Parte 3 - Blank space


Todo se empezó a convertir en un sueño, en comodidad, en pocos días, tan pocos días eramos tan cercanos... pero se empezaba a notar la distancia, no eramos amigos, no eramos conocidos, no nos conocíamos, no teníamos la confianza de una vida, no teníamos nombre, eramos personajes de un libro no escrito, y como ya decidimos escribirlo, así empezamos con una página en blanco. 
Esa semana se torno fría, oscura, y solo me sentía bien cuando estaba ella ahí, de repente todo el agobio, el estrés los problemas todo desaparecía, pero al volverse a ir, volvía la tormenta, todo rugía y todo era malo, problemas de salud en la familia, demasiada carga de trabajo, problemas de dinero en la casa, todo se juntaba como diferentes vientos que soplaban en direcciones opuestas hasta formar un gran huracán, y empezó a llover... sin fuerzas ni aliento me buscaron, me llamaron después de varios días de casi completa soledad rodeado de gente, sin paciencia ni ilusión por levantarme otro día más, y ahí vino murphy aporreando mi puerta, el abuelo de mi compañero se moría, llevaba tiempo viéndolo venir, y lo tenía más que asumido, o eso se creía él, le dije de ir a verlo, apoyarlo en estos momentos duros, la gente no esta acostumbrada a ver a la muerte como algo bello, yo ya acepte mi muerte hace tiempo, y la verdad pasó de ser algo terrorífico a ser algo tan natural como la vida misma, pero no me sentía cálido, no podría consolarlo mucho realmente, pero ahí estaría, me desechó, ya estaba acompañado y no sabían que iban a hacer, tanto él como su familia estaban desorientados con el papeleo y me dijo que solo estorbaría que la mañana siguiente me llamaría, aceptando su aplazamiento me metí en la cama, las dos de la mañana, y solo podía pensar en lo bella que había venido la Legendaria con su perro, con su pelo rizado y arreglada, y como el estúpido e inocente Carlillos no nos había dado ni un minuto de espacio, como él siempre él tenía que ser el centro de atención, y en ese día quería expresar la poca calidez que sentía dentro, pero no fue así, ese día tampoco fue como tenía que ser... cansado de todo deje que la noche invadiese mi cuarto, y me desvanecí entre las sombras de mis sabanas.

Parte 4 - Blue jeans


Otra mañana asomaba por el día, sin energía, sin ganas, sin vida me fui dejando llevar por las horas, apenas cruzamos palabras estamos bastante desmotivados en general por nuestros asuntos, además estábamos preocupados por nuestro compañero... tenía tantas ganas de verla... era la única que aportaba luz a ese día de mierda, pero las horas siguieron pasando, me llamó éste, volvía del entierro de su abuelo y necesitaba emborracharse, y la verdad yo necesitaba esa cerveza, quería ahogar un poco esa mentalidad deprimente que me acompaña con la luna menguante, sin ánimos le dije que sí, fuimos a beber sin esperar a nadie más, empezó a contarme historias de su abuelo, a llorar como una niña desconsolada, y a expulsarlo todo como si fuese una sangría de sentimientos, cuando se calmó empezó a contarme que había estado hablando con la Legendaria, que ya no estaba con el novio (por así llamarlo), estaba tonteando con ella y habían quedado para volver a acostarse juntos, que volvían a los "san sábados", y empezó a nublarse en mi interior todo, el huracán desapareció y empezó a llover, el silencio me invadía y empecé a notar como mi garganta se secaba rápidamente, sabía que llevaba una semana de mierda, pero no entendía nada de eso, opté por la sin razón, sería la segunda vez en mi vida que bebería para ignorar, no quería seguir escuchando sus palabras, todo lo que salía era azufre que se mezclaba con las gotas de lluvia que caían en mi interior, todo se fue llenando de ácido, y el estomago empezó a arder, pero las palabras no cesaron, me contó que no la quería que solo la quería para el sexo, que solo quería follar, y "esa perra es multiorgásmica" no mejoró nada la conversación, me levanté con la excusa de mear, el fuego invadía mi interior, quería reventarle la puta cara, pero no entendía porqué, el alcohol la tristeza y el odio... todo era uno en ese momento, así que entré me mojé la cara, me quedé mirando fijamente a una losa y al ver mi rostro distorsionado en ella sabía que aun no era suficiente, y que tenía que aguantar, hoy por él. mañana por ti, aguanta un poco más, golpeé la pared, fui a la barra y pedí más, la camarera algo pícara buscaba tiempo para sacarme conversación antes de cobrarme y darme la vuelta, estaba cansado, tenía muy mala ostia y pasaba de ella, se me empezó a lo que yo interpreté insinuar, y me dijo que me invitaba otro cubo luego si me lo tomaba con ella dentro, suspiré, arqueó una ceja y le dije dulcemente, estamos de luto, no puedo gracias y una sonrisa amarga se me dibujó en la cara, su cara de puta se torció en algo serio, como si aun dudara de mis palabras, me cobró y me dijo lo siento, y dije "no es a mí a quien se le ha muerto el abuelo" y la dejé atrás, solo quería beber, que dejara de llover e irme de ahí antes de que alguien más saliera herido, cuando me dijo él, vienen dos más, Carlillos y Legendaría, me quedé mirando el culo de esa cerveza aun llena, la levante cuando la dejé estaba vacía, no quería verla, no quería verte me susurraba adentro, mientras una voz oculta recitaba las palabras a fuego, "desconfía de los susurros pues los susurros siempre mienten", ya lo sé! joder, mi mente nublada discutía contra mí, la cerveza empezaba a hacerme efecto y solo quería huir de ahí, no pasó mucho hasta que llegaron, el silencio se hizo presente en todos lados, la vi y nos saludamos, no pude aguantarle la mirada, y ella notó que algo no andaba bien, pero desconfiada seguimos adelante, a partir de ahí mis recuerdos son en blanco y negro, como una película antigua conmigo de protagonista, me costaba pensar, me dolía estar cerca, y aun así contestaba, me encantaba mirarla, aunque no la podía mirar a los ojos, sus cicatrices, su fortaleza, cada herida era una historia, y quería saberlas todas, empecé a delirar cuando de golpe se unieron dos locas a la fiesta, empezamos un reto a ver quien averiguaba más de ellas sin saber nada, capricornio y leo... capricornio... mi vida entera rodeado de capricornios, su simple presencia ya me condicionaba, me ponía a la defensiva, veía caras, rostros, recuerdos, y mil imágenes de gente que ha ido quedando atrás, me quedé ahí, no podía expresar nada, veía las acciones sensaciones, sentimientos, empecé a mezclarlo todo pero no me salían las palabras, me faltaba el aire, y el ácido me empezó a ahogar, me levanté y decidí irme, solo escuchaba palabras vacías, cosas de Carlillos, del otro, bromas y directas de todos a todos, discusiones vacías, no tenía ganas de jugar, solo de irme, no era momento, no era yo, ese no era yo, me voy, me voy, y me fui, me dí la vuelta y escuché no hay huevos, el silencio se hizo de golpe, el fuego empezó a calentar de mi interior, me ardía, sabía que era a mí y no estaba ni mirando, que quieres de mi.. si ya lo tienes todo "hablado" si esta todo "decidido", a qué voy a ir... para qué quieres que vaya, en ese momento recordé que habías escrito "algo" en el libro, esa libreta negra compartida, y pensé que sería la despedida, simplemente una forma de decir vamos a pasarlo bien, he decidido y no eres tú, he decidido pero igualmente hoy lo daremos todo y lo pasaremos bien, pues bien, vamos.